De casta le viene al galgo. Y en el caso de Bryce Dallas Howard, este dicho se cumple sin ningún tipo de dudas. La popular actriz de Jurassic World nació en Los Ángeles, en el año 1981, hija del afamado cineasta Ron Howard, ganador de dos premios Óscar, a mejor director y mejor película por Una mente maravillosa, en 2002. Ambos iniciaron sus carreras en el campo de la interpretación. El progenitor apareció por primera vez en pantalla con Rojo atardecer (1959), con menos de 5 años, junto a Deborah Kerr y Yul Brynner en los papeles principales, mientras que Bryce Dallas Howard comenzó con ocho a las órdenes de su padre en la entrañable comedia Dulce hogar… ¡a veces! (1989), protagonizada por Steve Martin.

Posteriormente, y antes de interpretar a la científica Claire Dearing, activista por los derechos de los animales, en la saga jurásica, participó en dos de los títulos clave en la filmografía de M. Night Shyamalan, El bosque y La joven del agua, así como en Criadas y señoras, de Tate Taylor, o Spider-Man 3, de Sam Raimi, dando vida a Gwen Stacy.

Por su parte, Ron Howard, antes de debutar en la dirección en 1978 con la comedia Loca escapada en las Vegas, participó en títulos como American Graffiti, de George Lucas, y compartiendo pantalla con John Wayne en el western de Don Siegel El último pistolero.

Desde entonces, la filmografía de Ron como director se ha colmado de títulos taquilleros y tan relevantes como Llamaradas, Un horizonte muy lejano, Apolo 13, El Grinch, El Código Da Vinci y más recientemente Rush, Han Solo: Una historia de Star Wars o Hillbilly, una elegía rural, por la que Glenn Close era nominada este año al Óscar de la Academia de Hollywood.

Debut en la dirección de largometrajes para Bryce Dallas Howard

Ahora, mientras se última en postproducción Jurassic World 3, dirigida por Colin Trevorrow, y rueda un nuevo thriller de acción a las órdenes de Matthew Vaughn, Argylle, junto a John Cena y Henry Cavill, Bryce Dallas Howard se ha embarcado en su ópera prima en la dirección de largometrajes: un remake del clásico de los 80 El vuelo del navegante (Flight of the Navigator).

La recordada película original, que contaba la historia de un niño de 12 años que la noche del 4 de julio de 1978 era abducido por una nave espacial alienígena que le devolvía a su mundo cuatro horas más tarde, cuando en la línea temporal terrestre habían pasado 8 años. Un filme dirigido por Randal Kleiser (artífice de Grease o El lago azul) para la productora independiente Producers Sales Organization (responsables de otros éxitos de los ochenta como Rebeldes o La historia interminable) y Disney, que destacó en su momento por sus inéditos y asombrosos efectos visuales, mezcla de un primigenio uso de imágenes generadas por ordenador (CGI), maquetas y técnicas de stop-motion.

Carne también de videoclub, despuntó asimismo por su banda sonora, escrita por Alan Silvestri (Forrest Gump, Regreso al futuro, Capitán América: El primer vengador), que ambientaba el entorno de ciencia ficción, aventura, suspense y acción de la película.

Hasta ahora, Bryce Dallas Howard había dirigido varios cortometrajes, el documental Padrazos (2019), dos capítulos de The Mandalorian y el cuarto episodio de su esperado spin-off, The Book of Boba Fett, de estreno el próximo mes de diciembre.

Según ha desvelado The Hollywood Reporter, Bryce Dallas Howard producirá la película junto a John Swartz y Justin Springer bajo el paraguas de Walt Disney Studios, para su estreno directo en la plataforma Disney+.

Por otra parte, se ha conocido que, en esta ocasión, el papel protagonista será también para una chica según el guion que firman Brad Copeland (Ferdinand) y Joe Henderson (series Lucifer o 22/11/63).

Como reza el grito marinero de este titular, y servía como broche a la versión de Randal Kleiser, “¡Nos veremos, Navegante!”.