Cierto es que el director de cine M. Night Shyamalan destacó tras presentar la película de terror protagonizada por Bruce Willis El Sexto sentido (1999) y que a medida que ha continuado haciendo cine su número de detractores ha ido en aumento. No obstante, también son legión los que le admiran.
Para unos, su película favorita del director de origen indio es El protegido, para otros Señales o La joven del agua. Incluso hay quien defiende “El bosque”. Ahora Shyamalan está de nuevo en boca de todos con una propuesta para televisión, la serie Wayward Pines. Estrenada recientemente en FOX España, está basada en el best seller de Blake Crouch que relata la historia de un agente del Servicio secreto, que llega a la ciudad de Wayward Pines, en Idaho, para localizar a dos agentes federales desaparecidos. Sin embargo, nada en esa localidad parece tener sentido.
Un thriller psicológico a la medida de Shyamalan, director del primero de los diez episodios previstos, y productor ejecutivo de la serie que protagonizan Matt Dillon, Melissa Leo, Juliette Lewis, Toby Jones, Carla Gugino y Terrence Howard, un plantel que acumula un premio Oscar y tres nominaciones.
La crítica ha calificado al autor de Pines, la historia original, como el nuevo Stephen King. También podría compararse con H. P. Lovecraft por este título en el que sumerge al personaje principal en un lugar idílico y a la vez hostil, donde suceden hechos extraños, propios de otra dimensión. La novela ofrece una trama engañosa que engancha al lector. La serie presenta una historia tan misteriosa que al acabar cada episodio el espectador desea comenzar a ver el siguiente para saber más sobre lo que podrá sucederle al protagonista. Todo rema en la misma dirección: la ambientación, los personajes, los giros de guión. Hay a quien le recuerda a Twin Peaks, la mítica serie de David Lynch, e incluso a “Perdidos”, con un arranque muy similar (en Wayward Pines el protagonista despierta tras sufrir un accidente, en este caso de coche).
¿Podremos salir de Wayward Pines?
