"nunca te confíes.. "
Publicado: Jue Oct 13, 2005 1:04
Weno, meto esto aquí aunque no sea un relato, simplemente es algo que escribí para desquitarme, basado en algo que me pasó una noche; yo qué sé lo he encontrado por ahí y weno, como estos días se ha hablado por aquí de ciertas actitudes violentas pues ahí va.
"Te veo, ahí sentado frente a mí. Me miras, de hecho no dejas de hacerlo ni un solo segundo desde que me subí a este tren. Al principio con cierto disimulo, pero al haber poca gente alrededor dejás a un lado la sutileza. ¿Te gusto, verdad pequeño bastardo? Siento decirte que el sentimiento no es mutuo. No me gustan los cerdos como tú, me basta esa mirada para
detestarte.
Aprovechas para hacer algún movimiento y de paso rozarme. Parce que mis ojos airados no surten efecto en ti, así que opto por ignorarte. ¿Te divierte que te rechace? Maldito cretino. Miro por la ventana durante el resto del viaje, intentando no mirar tu reflejo en el cristal.
Por fin llega mi estación, rápidamente salgo del vagón y empiezo a andar, olvidándome de ti. Emprendo el camino hacia casa, y al poco rato sé que vienes tras de mí. Intento andar más rápido, pero ha llovido y el suelo está aún mojado, y no quiero resbalarme y caer, podría ser mi perdición.. estás tan cerca que puedo olerte. Maldita sea, empiezo a ponerme nerviosa. El camino a casa se hace ahora cien veces más largo, y mis pasos cien veces más lentos. Como uno de esos malos sueños. Te siento a mi lado, diciéndome cosas que no puedo oír debido a la música que me llega por los auriculares; y justo delante de nosotros aparece un callejón, como colocado ahí por el destino... Aprieto los puños hasta casi clavarme las uñas. De repente noto como agarras mi brazo con fuerza, poniéndome frente a tí, esa mirada de cazador otra vez y ya todo ocurre muy rápido..
Puedo asegurar que aunque rápido, fue muy doloroso. Joder, aún estoy temblando... él está tirado en el suelo del callejón, desangrado y con un trozo de lengua menos (eso de regalo, por tu jodida actitud de superioridad). Saboreo durante unos segundos como se le escapa la vida aún a borbotones, hasta que me puede el asco y siento una ligera náusea. Pobre imbécil, creía que yo iba a ser la víctima. Le escupo a la cara lo que queda de su sangre en mi boca y sigo mi camino."
Weno, por si alguien se pregunta cuál fue el final de lo ocurrido en realidad, diré que no fue tan violento para él.. yo si sé controlarme
"Te veo, ahí sentado frente a mí. Me miras, de hecho no dejas de hacerlo ni un solo segundo desde que me subí a este tren. Al principio con cierto disimulo, pero al haber poca gente alrededor dejás a un lado la sutileza. ¿Te gusto, verdad pequeño bastardo? Siento decirte que el sentimiento no es mutuo. No me gustan los cerdos como tú, me basta esa mirada para
detestarte.
Aprovechas para hacer algún movimiento y de paso rozarme. Parce que mis ojos airados no surten efecto en ti, así que opto por ignorarte. ¿Te divierte que te rechace? Maldito cretino. Miro por la ventana durante el resto del viaje, intentando no mirar tu reflejo en el cristal.
Por fin llega mi estación, rápidamente salgo del vagón y empiezo a andar, olvidándome de ti. Emprendo el camino hacia casa, y al poco rato sé que vienes tras de mí. Intento andar más rápido, pero ha llovido y el suelo está aún mojado, y no quiero resbalarme y caer, podría ser mi perdición.. estás tan cerca que puedo olerte. Maldita sea, empiezo a ponerme nerviosa. El camino a casa se hace ahora cien veces más largo, y mis pasos cien veces más lentos. Como uno de esos malos sueños. Te siento a mi lado, diciéndome cosas que no puedo oír debido a la música que me llega por los auriculares; y justo delante de nosotros aparece un callejón, como colocado ahí por el destino... Aprieto los puños hasta casi clavarme las uñas. De repente noto como agarras mi brazo con fuerza, poniéndome frente a tí, esa mirada de cazador otra vez y ya todo ocurre muy rápido..
Puedo asegurar que aunque rápido, fue muy doloroso. Joder, aún estoy temblando... él está tirado en el suelo del callejón, desangrado y con un trozo de lengua menos (eso de regalo, por tu jodida actitud de superioridad). Saboreo durante unos segundos como se le escapa la vida aún a borbotones, hasta que me puede el asco y siento una ligera náusea. Pobre imbécil, creía que yo iba a ser la víctima. Le escupo a la cara lo que queda de su sangre en mi boca y sigo mi camino."
Weno, por si alguien se pregunta cuál fue el final de lo ocurrido en realidad, diré que no fue tan violento para él.. yo si sé controlarme