La trama consiste en una investigación de unos reporteros que viajan a una casa en un pueblo donde se cree que se dan fenómenos poltergeist. Entrevistas con gente del lugar y la familia que vive allí parecen indicar que existe un ente maléfico en la casa... y los reporteros comienzan su aventura.
La cosa resultó ser más fuerte de lo que pretendían. Aunque en la película-documental aparecían créditos (dejando claro que es ficción), la mañana de su emisión una presentadora de un programa infantil anunció que se emitiría en directo.
Algunos niños británicos sufrieron de un "desorden de estrés postraumático", además de un suicidio de un chaval de 18 años con cierto retraso mental.
La BBC prohibió la redifusión del programa durante 10 años. En el 2002 salió en DVD, pero nunca volvió (ni volverá, probablemte) a emitirse.
Desde luego merece un visionado por estas fechas.
